La creencia común es que para competir en pruebas de resistencia es necesario entrenar largas horas para lograr la base necesaria para superar con éxito los compromisos competitivos, y aunque son necesarios, existen otros mecanismos para estimular la resistencia y la potencia promedio, los intervalos.
Un estudio realizado por Gale Bernhardt investigó los efectos del entrenamiento a corto plazo y de alta intensidad en 17 ciclistas entrenados. Para el experimento, los entrenamientos de velocidad eran dos veces por semana durante cuatro semanas. El primer entrenamiento incluyó cuatro sprints de 30 segundos seguidos por cuatro minutos de recuperación activa. El trabajo total de sprint fue de 28 minutos acumulados durante las cuatro semanas. El resto de la capacitación para el grupo de sprint fue entrenamiento de resistencia.
El estudio concluyó que cuatro semanas de entrenamiento de alta intensidad de velocidad combinada con entrenamiento de resistencia en una población ciclista entrenada incrementaba el rendimiento total de los ciclistas con los trabajos de intervalos comparado con solo entrenamientos de resistencia.
Los trabajos incluían sprint de entre 10 y 30 segundos, siempre con recuperación de al menos 4 minutos, mientras que los sujetos en los cuales se basó el estudio eran ciclistas que tenían al menos dos años de entrenamiento.
Algunas consideraciones generales
Si se está en buena condición física, los intervalos ayudaran a generar más potencia y disminuir el tiempo de recuperación del ciclista con los beneficios que eso implica para una competencia, si la forma física no es óptima, es importante realizar menos sprints y aumentar el tiempo de recuperación entre series para poder empezar a ganar forma física y conseguir los resultados deseados.
Los trabajos pueden realizarse al aire libre o indoor.
La clave del éxito es generar la mayor potencia posible en los sprints con una recuperación completa entre las series
No existen “milagros” es importante esperar al menos 4 semanas según el estudio para empezar a notar efectos, aunque los cambios más notorios vendrán después de quince semanas de entrenamiento.